España compromete el 39% de los fondos de la adenda al plan de recuperación

El Impacto de los Fondos de Recuperación en la Economía Española

En un momento crucial para la economía de España, los fondos comprometidos bajo la Adenda del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia han alcanzado la asombrosa cifra de 32.414 millones de euros a septiembre de este año. Esto representa un 38,99% del total asignado al país, que asciende a 83.140 millones de euros. Pero, ¿qué significa esto realmente para nosotros, los ciudadanos y las empresas?

Subvenciones y su Destino: Energía y Tecnología

Según el último informe de seguimiento sobre la ejecución del Plan de Recuperación, se ha comprometido un total de 10.454 millones de euros en subvenciones hasta septiembre, lo que equivale al 62,24% del monto comprometido en el mismo periodo del año pasado. La gran mayoría de estos fondos se han canalizado hacia iniciativas vitales como las energías renovables, la descarbonización industrial, la digitalización, y el desarrollo de infraestructuras sostenibles.

Es interesante notar que las convocatorias estatales han recibido la mayor parte de estos fondos, con un total de 7.305 millones de euros asignados. Esto representa un incremento del 1,15% en comparación con el año anterior. ¿No es genial ver cómo se están invirtiendo estos recursos en proyectos que pueden transformar nuestra realidad energética y tecnológica?

La Disminución en las Licitaciones y Transferencias

A pesar de las cifras alentadoras, hay aspectos que generan preocupación. El volumen de licitaciones de la Administración General del Estado ha caído a 1.945 millones de euros, lo que supone una disminución del 49% respecto al mismo periodo del año anterior. Además, las transferencias a las comunidades autónomas se han visto reducidas, alcanzando solo 1.204 millones de euros, lo que representa solo una cuarta parte de lo transferido en 2023.

Este panorama nos lleva a reflexionar: ¿cómo se puede acelerar la ejecución de proyectos y asegurar que estos fondos realmente lleguen a las comunidades y sectores que más los necesitan?

El Compromiso de los Fondos ‘Next Generation EU’

Hasta septiembre de este año, el Gobierno español ha comprometido un total de 108.495 millones de euros de los fondos ‘Next Generation EU’, lo que representa un 66,01% del total asignado al país, que se eleva a 163.801 millones de euros. Este compromiso indica un avance significativo, pero aún queda un 6% por comprometer del total previsto de 80.661 millones de euros en subvenciones no reembolsables.

¿Cómo se traduce esto en la práctica? Las grandes convocatorias lanzadas en 2024 han impulsado notablemente la gestión estatal, logrando un compromiso del 66,5%. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el ritmo de resolución de convocatorias parece haberse ralentizado, lo que podría frenar el impacto positivo que todos esperamos de estos fondos.

Proyectos Estratégicos en el Horizonte

Entre los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica, destaca el Perte Energías Renovables, Hidrógeno Renovable y Almacenamiento (ERHA). Este proyecto ha recibido un notable impulso en los últimos meses y es un claro indicativo de hacia dónde se dirige la economía española. La transición hacia un modelo más sostenible es una necesidad imperiosa, y estos fondos están diseñados precisamente para facilitar ese cambio.

Por otro lado, el Perte de Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC) ha superado su dotación inicial gracias a la reutilización de remanentes no adjudicados, alcanzando una tasa de adjudicación del 67,71%. Esto pone de relieve cómo la gestión eficiente de los recursos puede maximizar el impacto de estas inversiones.

Desafíos en el Cumplimiento de Convocatorias

Sin embargo, no todo es un camino de rosas. Hasta finales de septiembre, solo se ha publicado el 63% del total de convocatorias previstas para 2024, cuando se esperaba alcanzar el 75%. Desde LLYC subrayan la necesidad de un aumento en el ritmo de convocatorias lanzadas por la Administración General del Estado para cumplir con las expectativas. ¿Podrá el Gobierno adaptarse y responder a esta exigencia antes de que sea demasiado tarde?

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