Madrid aprueba aumentar al 50% la bonificación de Sucesiones y Donaciones a familiares cercanos

La nueva bonificación del impuesto de sucesiones en Madrid

En un giro significativo en la política fiscal de la Comunidad de Madrid, la Asamblea ha dado luz verde a un Proyecto de Ley que amplía la bonificación del impuesto de Sucesiones y Donaciones. Esta medida, respaldada por el Partido Popular (PP) y Vox, eleva la bonificación del 25% al 50% para las transmisiones a hermanos, tíos y sobrinos. ¿Qué implica esto para los ciudadanos madrileños? En esencia, una oportunidad de ahorro considerable para aproximadamente 14.000 personas, lo que se traduce en un alivio fiscal de 140 millones de euros cada año.

Detalles de la medida y su impacto económico

Además de la ampliación de la bonificación, el proyecto introduce cambios importantes en la normativa. Por ejemplo, se establece un 100% de bonificación para donaciones ocasionales entre particulares que no superen los 1.000 euros, y se elimina la necesidad de presentar autoliquidación para estas transacciones. También se simplifica el proceso de donaciones, permitiendo que se realicen sin la obligación de un documento notarial para cantidades hasta 10.000 euros. Esta simplificación busca fomentar la generosidad familiar y reducir la carga burocrática que a menudo desanima a muchos a realizar donaciones.

La defensa del proyecto por parte del gobierno regional

Rocío Albert, consejera de Economía, Hacienda y Empleo, ha defendido esta medida como un cumplimiento de las promesas electorales del PP. Ha argumentado que esta rebaja es parte de una política fiscal coherente que busca crear un entorno más favorable para la actividad económica, contrastándolo con lo que considera un aumento desmedido de impuestos por parte del Gobierno central. Albert ha enfatizado la importancia de «celebrar la vida y proteger la familia», sugiriendo que esta bonificación es un paso hacia una mayor libertad fiscal para los ciudadanos madrileños.

Reacciones encontradas ante la bonificación

Mientras que el PP y Vox acogen la medida con entusiasmo, la oposición ha expresado su descontento. Ana Cuartero, diputada de Vox, aunque apoyó la medida, criticó la continua «voracidad recaudatoria» del Gobierno regional y pidió más bonificaciones. En sus palabras, es esencial que la administración no solo se limite a ofrecer alivio fiscal, sino que realmente escuche las necesidades de los contribuyentes.

La crítica de la izquierda y las preocupaciones sobre la equidad

Desde el PSOE y Más Madrid, la respuesta ha sido contundente. Daniel Rubio, del PSOE, ha argumentado que estas medidas benefician principalmente a las clases más adineradas, dejando a las clases medias y trabajadoras con la carga de financiar los servicios públicos. Consideran que la política fiscal del Gobierno de Ayuso favorece a los ricos en detrimento del bienestar general. Marta Lozano, de Más Madrid, ha calificado la propuesta como un modelo de «acumulación hereditario, injusto y profundamente insolidario», sugiriendo que solo un pequeño porcentaje de las familias se beneficiará realmente de estas rebajas fiscales.

El futuro de la política fiscal en Madrid

Con el respaldo del PP y Vox, y la oposición de la izquierda, el futuro de la política fiscal en Madrid parece estar en una encrucijada. La implementación de esta bonificación podría marcar el comienzo de un cambio más amplio en la forma en que se gestionan los impuestos en la región. A medida que los ciudadanos se adaptan a estos cambios, surge la pregunta: ¿realmente se está favoreciendo a la clase media y a las familias, o se está perpetuando un sistema que beneficia a unos pocos?

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