El nuevo plan pesquero en el Mediterráneo: un esfuerzo conjunto de España, Francia e Italia
En un contexto donde la sostenibilidad y la viabilidad del sector pesquero son temas candentes, los ministros de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Francia e Italia se reúnen en Bruselas para presentar un plan que busca garantizar la actividad de la flota en el Mediterráneo. Luis Planas, al frente de la delegación española, defenderá un enfoque que limita la reducción de días de pesca a un 20%, una medida necesaria para evitar recortes drásticos como los del pasado diciembre, que llevaron a una reducción del 79% en los días de trabajo.
Medidas concretas para un sector en crisis
La propuesta que se presentará en Bruselas no es un simple documento; es un grito de auxilio de un sector que ha hecho un esfuerzo monumental por adaptarse a las nuevas normativas. Después de cinco años de la implementación del plan de gestión, está claro que se requieren correcciones urgentes. La idea de establecer un tope del 20% en las reducciones e incrementos de días de pesca busca mitigar el impacto negativo sobre la flota arrastrera, que enfrenta retos significativos en su operativa diaria.
La necesidad de una planificación a largo plazo
El enfoque de España no se detiene en limitar la reducción de días de pesca. También propone que los Totales Admisibles de Captura (TAC) y las cuotas pasen de ser anuales a plurianuales. ¿Por qué es esto importante? Simple: la planificación a largo plazo permite a los pescadores organizar sus actividades de manera efectiva, evitando sorpresas que puedan poner en peligro su sustento. Además, se busca permitir un 10% de flexibilidad en las posibilidades de pesca entre años consecutivos, lo que podría ser un salvavidas para muchos en el sector.
La protección de la biodiversidad marina y su impacto en la pesca
No se puede hablar de pesca sin considerar la salud de los ecosistemas marinos. La propuesta presentada por España, Francia e Italia también busca desvincular las cuotas de pesca de las poblaciones más vulnerables. Esto es crucial, ya que a menudo los intereses de conservación de especies específicas, como los alevines de merluza, pueden limitar las actividades de pesca de manera desproporcionada. La idea es encontrar un equilibrio que permita la pesca sostenible sin comprometer la recuperación de especies en peligro.
Un llamado a la unidad entre Estados miembros
Aunque esta propuesta no se someterá a votación inmediatamente, España, Francia e Italia invitan a otros Estados miembros a unirse a su causa. La colaboración es esencial para que la Comisión Europea actúe con rapidez y presente una modificación del plan plurianual del Mediterráneo Occidental. La pesca no solo es una actividad económica; es parte de la cultura y la identidad de muchas comunidades costeras. Por lo tanto, encontrar un camino que preserve la actividad pesquera y proteja las especies es una tarea que requiere de todos.
Prácticas comerciales desleales y su impacto en la agricultura
No solo la pesca enfrenta desafíos. En la misma reunión, los ministros de Agricultura y Pesca de la UE discutirán propuestas que abordan las prácticas comerciales desleales en el sector agrícola. Estas propuestas no son meras formalidades; buscan reforzar la posición de los agricultores en la cadena de suministro agroalimentaria. Al mejorar la cooperación entre Estados miembros, se espera que se logren relaciones comerciales más justas y equitativas.
Refuerzo de la organización común de mercados agrícolas
El reglamento sobre la organización común de mercados (OCM) que se presentará también es de suma importancia. Al establecer normas claras sobre los regímenes de intervención y ayuda en el mercado, se busca crear un entorno más estable para los agricultores. Las nuevas reglas de comercialización y relaciones contractuales entre agricultores y compradores son pasos hacia una mayor transparencia y equidad en el sector.