El PP denuncia la «voracidad fiscal» del Gobierno y exige ajustar el IRPF a la inflación

La voracidad fiscal del gobierno y su impacto en el bolsillo de los ciudadanos

La situación económica en España ha generado un debate intenso sobre la presión fiscal que experimentan los ciudadanos. Recientemente, el Partido Popular ha denunciado lo que consideran una «voracidad fiscal» del Gobierno, liderado por Pedro Sánchez. Según datos presentados por esta formación política, desde 2018 el Gobierno ha incrementado los impuestos en 74 ocasiones y las cotizaciones sociales en 23, afectando directamente el poder adquisitivo de las familias. Pero, ¿qué significa esto realmente para nosotros, los ciudadanos?

Inflación y su efecto en el IRPF

Uno de los puntos más críticos en esta discusión es la relación entre la inflación y el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). La inflación, que ha acumulado un aumento del 20,5%, y un impactante 37,3% en el caso de los alimentos, ha llevado a que los ciudadanos paguen más IVA cada vez que realizan una compra. Este aumento en los precios no solo afecta nuestro día a día, sino que también provoca que más dinero fluya hacia el Gobierno a través de un IVA en constante ascenso. En este contexto, el PP sostiene que la progresividad en frío del IRPF ha aumentado el tipo medio efectivo de este impuesto, que ha subido del 12,8% en 2019 al 14,7% en 2023. ¿Realmente podemos permitirnos un sistema que incrementa nuestra carga fiscal cuando deberíamos estar viendo un alivio?

Las cifras detrás de la presión fiscal

Los números son reveladores. Según el último informe anual del Banco de España, el coste estimado de esta progresividad en frío se traduce en una pérdida de 11.000 millones de euros para los ciudadanos. Esto no es solo un número; es la capacidad de las familias para cubrir sus necesidades básicas, ahorrar para el futuro o, simplemente, disfrutar de la vida. Además, el PP argumenta que, a pesar de ser un país con un alto nivel de impuestos, España se encuentra en la sexta posición de los 27 países de la UE en cuanto a menor aumento de la renta real per cápita desde 2018. Esto nos plantea una pregunta inquietante: ¿qué estamos haciendo mal?

Propuestas del PP para corregir el rumbo

Ante este panorama, el Partido Popular ha propuesto una serie de modificaciones al IRPF que buscan ajustar la tarifa a la inflación. Su iniciativa incluye la revisión de al menos los tres primeros tramos del impuesto, así como de los mínimos personales y las deducciones que se aplican en función de las circunstancias familiares y personales. La idea es clara: queremos que el sistema fiscal sea más justo y refleje la realidad económica que enfrentamos. ¿No sería razonable que, en lugar de ver cómo nuestros salarios se diluyen por el efecto de la inflación, el Gobierno actúe para proteger nuestra capacidad de compra?

En un momento en que España se posiciona como el tercer país de la UE con mayor aumento en la presión fiscal desde 2018, es esencial que se realicen ajustes que beneficien a la ciudadanía. Mientras la media de la UE ha visto una disminución del 1,1% en la presión fiscal, aquí estamos enfrentando un incremento del 1,8%. Esto nos lleva a cuestionar si nuestras políticas fiscales están alineadas con el bienestar de los ciudadanos o si, por el contrario, se han convertido en un obstáculo para nuestro progreso económico.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *