La importancia del efectivo en el contexto actual
En un mundo donde la digitalización parece haberlo conquistado todo, la Plataforma Denaria plantea una cuestión crucial: ¿deberíamos considerar el dinero en efectivo como un servicio público esencial? Esta interrogante surge en un contexto donde las transacciones digitales se vuelven predominantes, pero donde el efectivo sigue siendo un salvavidas en momentos de crisis. En una reciente jornada celebrada en Alicante, Denaria ha solicitado formalmente al Banco de España que tome la iniciativa para declarar el efectivo como un servicio esencial y, aunque la decisión final recae en el Gobierno, este podría ser el primer paso hacia un cambio significativo.
El papel del Banco de España en la inclusión financiera
El Banco de España no solo es un ente regulador, sino que también juega un papel fundamental en la inclusión financiera y el acceso al efectivo. Denaria destaca que esta institución es la adecuada para liderar la declaración del efectivo como un servicio esencial, ya que ha estado desarrollando el Índice de Vulnerabilidad en el Acceso al Efectivo (IVAE), identificando áreas y grupos en riesgo de exclusión financiera. ¿No es fascinante cómo una simple moneda puede simbolizar tanto poder y estabilidad en nuestra economía?
La resiliencia del efectivo frente a la tecnología
Imaginemos por un momento un escenario apocalíptico: apagones masivos, desastres naturales o ciberataques. En estos casos, el dinero en efectivo se convierte en una herramienta invaluable. A diferencia de los sistemas de pago digitales, que pueden fallar en situaciones críticas, el efectivo sigue siendo una alternativa viable. Denaria argumenta que, al igual que otros servicios esenciales como el transporte o las telecomunicaciones, el acceso al efectivo debe ser considerado una infraestructura crítica para la sociedad. ¿No resulta irónico que, en un mundo tan conectado, algo tan simple como el papel moneda pueda ser nuestra última línea de defensa?
Un llamado a la acción: aprender de otros países
Países como Francia, Suecia y Eslovenia han empezado a implementar medidas para garantizar el acceso al efectivo, reconociéndolo como un elemento esencial de la resiliencia nacional. Este movimiento nos invita a reflexionar sobre la dirección que estamos tomando en España. Al considerar el efectivo como un servicio esencial, no solo se protege a los ciudadanos, sino que también se fortalece el tejido social y económico del país. ¿Realmente queremos arriesgar la estabilidad financiera de nuestra población en favor de un modelo completamente digital?
La protección de derechos ciudadanos a través del efectivo
La Ley 17/2015, que define los servicios esenciales en el Sistema Nacional de Protección Civil, incluye aquellos que aseguran el bienestar social y la seguridad de los ciudadanos. En este contexto, el efectivo podría ser visto como un derecho fundamental que no debe ser arrebatado en tiempos de incertidumbre. La Plataforma Denaria nos recuerda que, al garantizar el acceso al dinero en efectivo, se está protegiendo un derecho básico que permite a todos participar en la economía sin barreras. ¿No sería sensato que comenzáramos a valorar el efectivo como lo que realmente es: un pilar de nuestra sociedad?